Es difícil contemplar ese ayer bañado en lágrimas. Cuando hoy parece estar todo perfecto, cuando tengo que ocultar esa felicidad para no contradecirme. Me odio por querer, pero no puedo hacer nada. El juego se acabó y perdí, pero no me molesta haberlo hecho. Todo lo contrario, el único dolor se hace llamar príncipe de un país lejano.
Sé que hay una reina oscuridad controlandolo todo. Yo no puedo hacer nada contra ella. No puedo hablarle. Quisiera decir tanto, o no… quisiera decir poco. Dos palabras pero el miedo es más grande. Ese miedo a lastimarte, ese miedo a que termine mal. Miedo a que yo haya caído en tu juego, miedo a que no falte mucho para que desaparezcas en el corcél de tu príncipe perfecto. Miedo. Porque soy un maldito cobarde.

-------------------------------------------------------------------------------

Perdonar y retroceder. Proteger, advertir. Obtener, sufrir, sonreír, dejar. Permitir, contemplar, usar, comprender. Ayudar, tomar, sentir y otorgar. Guiar, abrazar. Confiar, dejar otra vez. Derramar. Llorar.
Volver, recordar. Recorrer, gritar, dejar una vez más. Explicar, sacrificar. Interrumpir, despedir, susurrar. Alejar, olvidar. Quitar, dejar…dejar. Prometer y dejar. Lastimar y dejar. Ilusionar y dejar. Volver y dejar. Torturar y dejar. Amar.
Estoy enamorado de una princesa. Cuando debía ser al revés. La amo, y… no sé que demonios hacer con eso. Lástima Kenzo, perdiste el juego. ¿Vas a aceptarlo?
De alguna forma todo comienza. El ganar o perder, el subir o caer. Ahora estoy esperando por una pequeña esperanza. Mientras que hace frío, mientras que ese rencor por mi sangre se convierte en melancolía. Es difícil decir “te necesito, te extraño hermana. Lo siento, perdón, te quiero.” Es muy difícil. Imposible.
No hay fuerzas para crecer ahora. El tiempo se va, corre frente a mis ojos. Y… ya. No lo sé, es en vano.

--------------------------------------------------------------------------------

Me has enseñado a ser fuerte, a no vivir de los demás, a desconfiar de lo que era demasiado bueno, a convencer con palabras halagadoras, a chantajear cuando más nos convenía, a aprobecharme de las oportunidades, a sacar a patadas a la gente de nuestra casa... a olvidar lo que significa tener una madre...a odiarte...a respetarte...a ser tu único hijo. Me enseñaste a aspirar a mucho más, a vivir un poco más.
Me enseñaste tanto y a la vez nada. Porque no me enseñaste como corresponde, porque no eres más que una mentira. Porque no eres el comprensivo valiente, eres el cobarde humillado que para superar su pérdida le hace perder a los demás.
Sam y yo no te necesitamos. No tienes que volver a lastimarla. No vas a hacerlo porque yo la cuidaré aunque me odie. Yo me encargaré de eso ahora, porque somos los únicos Kenzo en el mundo: ella y yo. Tú puedes morir en paz.

--------------------------------------------------------------------------------

Capaz de mentir, capaz de engañar. Capaz de superarse. Capaz de reflejar lo inexistente, capaz de dejar que la máscara quede para siempre.
Incapaz de detener la tempestad, la magia no sirve para calmar el tintineo de la lluvia. Ni el más poderoso hechicero podría espantar las nubes de realidad que hay sobre mí.

Algún día, si estoy lo suficientemente loco dejaré ver este cuaderno completo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario